Ni una palabra ha dicho hasta ahora la Inmobiliaria Mall Viña del Mar S.A. en torno a la paralización de su proyecto en 14 Norte, medida que ayer, motivó que más de una centena de trabajadores de la empresa Desco y otras pequeñas contratistas, saliera a la calle a protestar por la eventual pérdida de sus empleos.

Mientras la empresa guarda silencio ante la medida ratificada esta semana por la seremi Minvu, los trabajadores decidieron alzar la voz, señalando que, una vez más, son los obreros los más perjudicados por culpa de una razón administrativa que poco y nada entienden.

Hecar Clark, vocero de los trabajadores que ayer protagonizaron una manifestación pacífica que terminó en escaramuzas con Carabineros de Fuerzas Especiales y un total de 5 trabajadores detenidos por desórdenes públicos, explicó que recién en la mañana se enteraron oficialmente de la medida que, según dijo, no sólo afecta a más de 400 trabajadores que temen ser despedidos, sino que también a sus familias.

'Los trabajadores somos siempre los afectados. Nosotros queremos que las autoridades nos den la cara (...) Cuánto tiempo va a pasar para que esto se resuelva, y mientras tanto nosotros qué, dónde encontramos pega (...) No somos 400 trabajadores porque cada uno de nosotros nos multiplicamos por 4, que son nuestras familias', comentó el trabajador.

Mientras el vocero explicaba las razones de la manifestación, otros trabajadores criticaron la burocracia en torno a los permisos, precisando que se privilegia lo administrativo por sobre lo social, apuntando sus dardos contra el concejal Andrés Celis, quien denunció las irregularidades en este proyecto.

El aludido, se mostró dispuesto a recibir a los trabajadores e incluso invitarlos a participar de la comisión del Concejo. Celis precisó que existiendo contratos vigentes con la empresa contratista éstos deben cumplirse no existiendo, a su juicio, justificación alguna para que se produzcan despidos.

'Ojo que lo que yo he señalado es que la empresa debe ajustarse a lo que dice la ley y eso no significa que tengan que botar la obra o demolerla, sino que deben regularizarla con un nuevo permiso de acuerdo al actual plan regulador (...) La empresa estaba notificada hace mucho tiempo, hace años (...) Aquí la única víctima son los trabajadores y los viñamarinos, los responsables y los culpables es la empresa. La empresa tiene que regularizar el permiso de obra', insistió Celis quien añadió que bajo el argumento de la pérdida de empleos o despidos debiera permitirse que en todo Viña se construya edificios de 50 pisos sin ninguna regulación.

En el mismo tenor se manifestó la alcaldesa Virginia Reginato, quien junto con lamentar la situación de los trabajadores sostuvo que 'toda inversión en Viña del Mar debe cumplir, en primer lugar, con las normativas vigentes, y en segundo lugar, debe aportar al desarrollo equilibrado de la comuna'.

'La empresa cuestionada tiene el deber de cumplir con las normas urbanísticas, porque nadie está por sobre la ley y una vez que se acaten, la municipalidad estará disponible para que entre todos logremos una mejor solución para esta importante zona comercial viñamarina', precisó la jefa comunal. J