De todo ha vivido en poco más de cuatro años de permanencia en Everton, el atacante argentino oriundo de Río Gallegos (ciudad ubicada en la Patagonia argentina, a 2.539 kilómetros al sur de Buenos Aires), Maximiliano Iván Ceratto Ferrero, quien, este domingo ante San Luis de Quillota, jugará su partido oficial N° 100 con la tricota oro y cielo.

Una gira por Europa, dos descensos y un retorno al fútbol grande son parte de las historias que puede contar este futbolista de ahora 26 años, quien hoy en día es junto a su compañero Francisco Silva, uno de los goleadores del fútbol de la Primera B.

Respecto a lo que se viene -su partido número cien en Everton- el atacante dijo sentirse feliz y orgulloso de defender la casaquilla oro y cielo.

'Cumplir cien partidos en Everton, de verdad que es muy lindo para mi. Es algo también muy importante para mi carrera, ya que Everton es una institución muy grande y que me ha tratado muy bien desde que llegué a mediados del 2010. Hoy en día estoy pasando un momento muy bueno en lo personal y ojalá que este domingo pueda festejar mis cien partidos ganándole a San Luis'.

'Fue todo muy rápido. Camilo Rozas había viajado a Argentina a ver mis partidos, luego lo hizo Nelson (Acosta) y tras un partido contra Deportivo Morón, yo jugando en Defensores de Belgrano, conversó conmigo y yo de inmediato acepté. La verdad que me gustó mucho el proyecto y me encantó la idea de venir a un club tan importante como Everton'.

'Mirá... le verdad que no pensé mucho en eso. Luego cuando llegué acá, vinieron unas cuantas réplicas y uno obvio que se asusta... como todos. Pero más allá de eso, no he tenido problemas acá en Viña'.

'Lo recuerdo muy claramente, ya que debutar ante ese rival, en el Monumental... fue algo muy lindo, soñado. Al margen del resultado que no fue bueno (Everton cayó 0-2), recuerdo que lo disfruté mucho'.

'Lo que pasó es que justo un día antes del viaje sentí una molestia muscular, pensamos que sería sólo una contractura, pero no fue así. Yo de igual modo viajé y le agradezco mucho al club, ya que como experiencia... fue algo inolvidable'.

'Así es. Yo recuerdo que dejamos todo, el alma y la vida con Diego Osella en los últimos partidos, pero de verdad... no se pudo. Yo en lo personal creo que tuve un buen rendimiento, lo que incluso motivó el interés de algunos equipos de Primera que me quisieron en ese entonces'.

'Fueron etapas duras, ya que jugar en Segunda División no es fácil. Al principio nos costó mucho, hubo un cambio de técnico y la verdad que con el Fantasma Figueroa hicimos partidos muy buenos, pero el plantel era muy corto. Recuerdo que salimos campeones en Temuco, lo que nos llevó a jugar la final con Rangers y luego la promoción con San Felipe, pero ya el plantel estaba desgastado. Con Rangers tuvimos el ascenso en Viña, pero se nos escapó en los últimos minutos. Y luego el 2012 con Víctor Hugo (Castañeda) llegamos a la definición contra la Universidad de Concepción y la verdad que lo disfruté mucho. Recuerdo incluso que hasta lloré de la emoción, ya que se hizo un gran trabajo en esos dos partidos finales. La gente que nos acompañó... fue increíble. Ver esa bandeja en Concepción llena de hinchas, fue realmente increíble... fue espectacular el marco que nos acompañó allá'.

'Fue muy triste y sufrimos mucho. Ese empate ante Huachipato fue muy doloroso para todos y se lamentó mucho, pero ya está atrás. El fútbol tiene todas estas cosas, a veces se está bien, otras mal, pero lo importante ahora es que estamos todos motivados y enfocados en llevar a Everton de regreso a Primera', sentenció el veloz atacante oro y cielo. J