Cerca ca de las 10.30 de ayer, Carolina López y Mauricio Delgado subían por las escaleras del Registro Civil de Valparaíso para poner la firma frente al oficial y ser marido y mujer ante la ley. Habían pedido la hora hace más de tres meses y querían de esta manera sellar una relación que comenzó hace más de tres años.
Sin embargo, una llamada anónima echó por tierra los planes del matrimonio y, peor aún, generó un operativo encabezado por el Gope de Carabineros, que terminó con las calles Prat, Esmeralda y Cochrane cortadas para el tránsito peatonal y vehicular.
Se trataba de un aviso de bomba el cual, a través de una voz femenina, alertaba a un funcionario del Registro Civil de Valparaíso que en el segundo y tercer piso se había instalado u artefacto explosivo que detonaría en pocos minutos.
El funcionario que recibió el llamado a su teléfono personal dio aviso inmediato a los guardias de seguridad, quienes a su vez se contactaron con la dirección regional del Registro Civil.
En cosa de minutos, efectivos del Grupo de Operaciones Especiales de Carabineros llegaron hasta el lugar para verificar si el aviso era cierto.
Luego de más de 45 minutos, durante los cuales el edificio de calle Esmeralda permaneció sin atender y sin funcionarios ni público en su interior, se normalizó la situación, al no encontrarse nada sospechoso en el interior.
Recién entonces Carolina y Mauricio pudieron hacer ingreso nuevamente al recinto para, ahora sí, casarse ante la ley. 'Nos casamos hoy día sí o sí , ya hemos esperado mucho', dijo ella. J