Barristas queman la bandera de Wanderers en la Aduana
fotos: manuel lema
Alexis Borvaran es porteño y wanderino de corazón. Vive en Antofagasta y hace 11 años que no venía a Valparaíso. Aprovechando el feriado y las vacaciones escolares, junto a su familia decidió ayer recorrer y fotografiar los atractivos de la ciudad patrimonial. Pero mayúscula fue su sorpresa al descubrir que, en la plaza Aduana, fue agraviado el monumento que la municipalidad levantó en honor al club porteño. El mástil se hallaba recubierto de hollín, sin la tradicional bandera blanca y verde, que había sido destruida por el fuego.
El martes, tras la denominada 'noche oro y cielo', en el estadio Elías Figueroa de Playa Ancha, hinchas de Everton que volvían a Viña del Mar, escoltados por efectivos de Fuerzas Especiales, se detuvieron en la plaza Santiago Wanderers, ubicada en el sector de la Aduana.
En medio de un centenar de barristas evertonianos, uno de los desadaptados prendió fuego al emblema caturro, que se consumió en cuestión de minutos.
En el tumulto, Carabineros no logró identificar al responsable del hecho.
'Es algo característico del Puerto ver el estandarte de Wanderers flameando y lo queman por una nimiedad... Está bien que apoyen a su equipo, pero hacerle un daño a una ciudad no corresponde. Sé que hay rencillas con Everton, pero no debería ser esto. Es lamentable', sostuvo Alexis, apenado por la afrenta contra el emblema del equipo.
La quema de la bandera fue sólo parte de una jornada que se tornó violenta tras el partido entre Everton y la Universidad de Chile y que incluyó el apuñalamiento de un hincha oro y cielo (ver nota aparte) y un intento de saqueo por parte de seguidores de la U.
Cerca de las 00.30 horas de ayer, Carabineros recepción un llamado desde el servicentro Copec, ubicado en la intersección de las avenidas Brasil y Errázuriz,, respecto de que sujetos con la camiseta de la Universidad de Chile estaba sustrayendo especies desde el interior.
Al lugar acudió personal de la comisión civil de la Segunda Comisaría Central, que inició una persecución de los sujetos hasta la esquina de avenidas Argentina y Pedro Montt, donde se produjo el arresto de cuatro de ellos, identificados como I.M.L., N.E.C., R.P.U. y N.C.C.
Mientras se tomaba declaración a los encargados del servicentro, otros siete barristas trataron de saquear el mismo local, pero fueron arrestados por desórdenes públicos. En otros puntos del plan se registraron desordenes con daños menores.
En el mismo estadio playanchino, tras el cotejo, fueron aprehendidos dos hinchas de la U por encender bengalas, por lo que pasaron al juzgado de garantía en el marco de la ley de violencia en los estadios.
Herido en su sensibilidad como porteño, wanderino y alcalde se mostró ayer el jefe comunal, Jorge Castro, al enterarse de la quema de la bandera caturra y los daños a la placa conmemorativa que, hace cuatro años, el municipio instaló en esa plazoleta.
'Esta bandera era un emblema, marca el ingreso al sector del estadio y durante cuatro años ha sido un hito para la comunidad porteña y la comunidad wanderina. Nunca ha tenido la intención de ser un foco de irritación o provocación para los otros clubes sino que, por el contrario, ser un símbolo y una invitación para que la familia vuelva al estadio. Lo ocurrido no tiene nombre, es un dolor para el pueblo wanderino', manifestó el edil a La Estrella.
Y como se trata de una afrenta, Castro invitó a las dirigencias de ambos clubes a hacer un acto de desagravio en el lugar y así dejar atrás esta afrenta y las odiosas rencillas de algunos hinchas hiperventilados.
El presidente de Santiago Wanderers, Jorge Lafrentz, anunció ayer que hoy será izada una nueva bandera blanca y verde en la plaza Aduana, cuya reposición correrá por parte del club porteño.
El dirigente manifestó que la persona que quemó la bandera caturra 'no merece llamarse hincha'. Sobre el caso del evertoniano apuñalado, dijo no tener antecedentes, pero pidió que se investigara el caso y se hiciera justicia. J