Ruddy Rey sufre una fuerte crisis emocional y sicológica
Humoristas "víctimas del Monstruo" aconsejan al porteño cómo superar el mal momento.
Alejado de la prensa, en compañía de su familia y con mucha pena se encuentra Ruddy Rey. El humorista que fue pifiado en Viña del Mar no logra reponerse de su fallida presentación en la Quinta Vergara.
Su manager Iván Huerta comentó que su representado está muy mal. "Tiene una crisis emocional. Está muy triste por lo que pasó, no tiene ganas de nada. Siente que el trabajo de 12 años se le fue abajo. No hubo contención del canal(CHV), Ruddy salió cuando pedían a Ana Gabriel", dijo su manager.
Huerta comentó que al humorista también le dolió mucho ver los comentarios que realizaban los programas sobre su presentación en Viña. "Al día siguiente de estar en la Quinta Vergara vio la televisión y los medios en vez de hablar con fundamentos lo destruyeron más".
El manager del artista dijo que no está bajo un tratamiento psicológico, pero si sigue viviendo esta crisis lo más probable es que se recurra a la ayuda de un especialista. "Hemos llorado juntos. Él ha tenido problemas para dormir y para hacer su vida normal", explicó.
Ruddy estaría tratando de reponerse lejos de su hogar. "Está en una especie de retiro. En un lugar tranquilo, en contacto con la naturaleza. El lunes viajaríamos fuera de Chile para que él pueda recuperarse mentalmente".
APOYO DE COLEGAS
Sus colegas manifestaron su apoyo al humorista que sufre una crisis emocional. "Tiene que tomárselo con humor", dijo Óscar Gangas, quien fue pifiado la primera vez que se presentó en la Quinta Vergara.
El ex participante de "Hazme reír" dijo a La Estrella que Ruddy no debería tomarse tan en serio lo sucedido. "Creo que la solución es que él tome este episodio con humor, que lo meta en una nueva rutina. Yo lo hice así, me reía de lo que me pasó en Viña la primera vez".
Aunque el humorista reconoce que cuando fracasó en Viña en 1998 nunca se escondió de los medios. "Yo di varias entrevistas donde hablé de lo que pasó. Además seguí trabajando sin parar. Después me preparé mejor y volví a ir al Festival con éxito", dijo.
Gracias no se molesten
Ricardo Meruane también se convirtió en una víctima del monstruo en 2011 cuando su rutina no hizo reír al público del Festival. El humorista comentó que para recuperarse fue clave su trabajo en "Gracias no se molesten", espacio de Vía X donde bromeaba con lo que le sucedió en Viña. "Fue como una terapia el programa. Él (Ruddy) debería actuar lo más luego que pueda y hacer una rutina con lo que le sucedió", señaló.
El humorista comentó que espera que su colega se recupere pronto y tiene pensado llamarlo o escribirle un mail para brindarle su apoyo.
Natalia Cuevas, quien no tuvo buenos resultados a estar en Viña en 2004, concuerda en que Ruddy debe salir adelante y no pensar que es el fin de su carrera. "Que se lo tome como un accidente, a veces uno se equivoca en las formas, pero no quiere decir que se mata al artista", comentó.
La ex figura de Canal 13 cree que hay que darle tiempo al humorista para recuperarse. "Yo también estuve muy achacada, triste y con mucha vergüenza. Él (Ruddy) tiene que pasar por esta crisis donde el ego está herido, pero el talento y las ganas se mantienen", comentó.
Oportunidad
El sicólogo Mauricio Valenzuela comentó que el humorista tiene que ver la complicada etapa que vivió como una forma de aprender y analizar en qué se equivocó. "Lo más importante es sentarse con él y que entienda que lo que le pasó no es el fin del mundo", dijo el especialista.
El panelista de "SQP" comentó que al sufrir una fuerte frustración el cómico probablemente enfrente un periodo depresivo. "Debe ver todo negro, pero debería cambiar la mirada y considerar que lo que sucedió puede ser una oportunidad de sacar una enseñanza". El sicólogo cree que está bien que Ruddy se mantenga alejado de los medios y se dé un tiempo para asimilar lo sucedido. "Es bueno tomarse una pausa y tener un periodo de reflexión, aunque no de aislamiento porque eso es señal de depresión".
"Ruddy debe ver todo negro, pero debería cambiar la mirada y considerar que lo que sucedió puede ser una oportunidad". Mauricio Valenzuela, sicólogo