Cuando faltaban pocos minutos para que comenzara la cuarta jornada festivalera, el director del programa, Álex Hernández se lo dijo a todo Viña: Cecilia Bolocco, la reina de Chile, estaba en el palco de la Quinta Vergara.

En ese momento, la rubia, ataviada con una parka gris bien abrigadora, caminaba hacia la alcaldesa Virginia Reginato y la saludaba con un afectuoso abrazo. Luego hizo lo mismo con el director de Chilevisión, Jaime de Aguirre.

Ese fue el inicio de su gran noche festivalera. Porque la Chechi aprovechó la invitación y estuvo en el backstage con Beto Cuevas y más tarde se lo bailó todo al ritmo de Carlos Vives. A su lado siempre estuvo su hijo Máximo.

Obviamente tanto vallenato la acaloró y quedó sólo con una camiseta blanca. Carlos Vives no pudo abstraerse de esa imagen y desde el escenario le preguntó a la diva: "¿Dónde estabas hace veinte años?", entre otros guiños. Ella le respondió con una sonrisa coqueta, consciente de que la cámara estaba pendiente de ella.

Y Vives seguía ahí, armando la mansa fiesta. Si hasta una pedida de matrimonio hubo durante su actuación que le valió el "four pack" festivalero.