Bajo una tensa calma, con inéditas medidas de seguridad (hasta un furgón de Carabineros de Quintero, se instaló en las cercanías de los vestuarios en Mantagua) y con una hora de retraso respecto a la citación entregada en Wanderers, apareció ayer el técnico caturro, Ivo Basay, para explicar o tratar de justificar su "numerito" del sábado en donde, por error, hizo jugar a un sexto futbolista extranjero en cancha de manera simultánea ante O"Higgins, lo que está estipulado y prohibido -en forma clara- en las bases de los torneos oficiales 2013-2014, entregadas por la ANFP.

De este modo y acompañado por el gerente general de la empresa "JF Seguridad Integral", Juan Frez Navarro, apareció el cuestionado técnico porteño, quien, ahora sin la presencia de hinchas ni simpatizantes caturros en los alrededores, comentó lo sucedido la tarde del sábado en el Nicolás Chahuán.

"El tema del por qué no había hablado antes, fue porque la directiva me había pedido que no hiciera declaraciones en caliente después de los acontecimientos así que por eso dejamos pasar unos días, también a la espera de lo que tenían que decir los directivos. Ayer (el martes) me invitaron a participar de la conferencia que ofreció Alberto Eguiguren con el abogado Rafael González, pero opté hablar hoy, ya que esto es un tema absolutamente mío. Lo concreto es que no hablé antes ya que en caliente se pueden decir muchas cosas, pueden surgir incluso insultos y las respuestas no van a ser las más adecuadas".

MEA CULPA

En relación a lo sucedido el sábado, Basay indicó que la culpa es suya.

"El mea culpa es completo y mío. Yo no puedo eludir mis responsabilidades y las disculpas son para la gente, en especial para aquellos hinchas que van siempre al estadio y que apoyan y quieren a Wanderers. Acá los jefes no pueden desligarse de las responsabilidades y acá... la culpa es mía, de nadie más. Soy yo el responsable y lo he pasado bastante mal por todo esto, al igual que la gente y la directiva. Aprovecho también para pedirle disculpas a mis jugadores".

-Si bien usted ya ha asumido sus culpas, ¿qué sucedió en aquel instante en donde se ordena el ingreso de Cellerino?

-Fue más que nada, por la refriega del partido. Yo no me di cuenta y eso que uno tiene siempre cuidado con el tema de los extranjeros. En el fragor del tema, uno trata de mejorar pero acá, independiente de como fue el tema, acá la única responsabilidad es mía.

-Sin justificar la violencia que hubo el martes en Mantagua, ¿se entiende un poco el malestar de los hinchas?

"Pero obviamente, pero me parecen desmedidas las agresiones. Por comprar una entrada, se entiende que el hincha puede gritar y decir lo que quiera, pero Mantagua es un recinto privado y si bien yo no sufrí agresiones físicas, le pegaron al auto, rompieron un vidrio al costado y ese tipo de cosas no las puedo permitir. Lo demás, la molestia... es comprensible, y por eso que estoy ahora dando la cara".

EL riesgoso SILENCIO

-Más allá de la falta, ¿siente usted que se ha agrandado un poco el tema?

-En parte sí, pero también se entiende por mi silencio. A lo mejor hubiese correspondido hablar después de finalizado el partido, pero ustedes vieron como estaba la gente y uno también está a mil por hora... entonces, con todo el problema, si me gritan algo o me agreden podría responder, siendo que no corresponde.

-¿Es este el momento más complicado suyo en Wanderers?

-Si, pero no por el resultado, sino que por la situación misma y por lo que le hemos hecho pasar al club, a nuestros jugadores y a la gente.

-¿Lloró en el camarín?

-No, no lo hice. Que lo he pasado mal, te lo aseguro. Nosotros también queremos a Wanderers, queremos la institución. Y aunque la gente nos diga que somos santiaguinos o colocolinos, yo estoy aquí por un proyecto y estamos defendiendo a la institución con el máximo de profesionalismo. Que cometimos un error grave... claro que sí, pero no por ello me voy a arrancar". J

En relación a la situación -y los puntos- del encuentro entre Wanderers y O"Higgins, el presidente del tribunal de Disciplina de la ANFP, Angel Botto, indicó que "el club Santiago Wanderers está citado para el próximo martes, a fin de que haga sus descargos y alegaciones y, mientras tanto, las cosas están exactamente iguales... como que no hubiese pasado nada".

El abogado agregó que "mientras no haya una sentencia de término, no se puede decir nada. Yo de momento, no tengo idea lo que está planteando Wanderers, y si salen con alguna cosa, nos veremos obligados a estudiar el caso para realizar un fallo fundado, ya sea a favor o en contra".

Cabe destacar que el fallo del tribunal es apelable -por ambas partes- por lo que el caso incluso podría ser derivado a la Segunda Sala del tribunal de penalidades de la ANFP.

Caturros quedaron citados para el próximo martes

Ivo, ¿ha pensado luego de todo esto, en renunciar o poner su cargo a disposición de la dirigencia?

-No... no, para nada. Incluso por ahí dijeron que no me echaban porque no tenían plata. Aquello jamás ha sido cierto y Alberto (Eguiguren) ayer fue claro al respecto. Lo otro, por ahí se ha hablado mal de la campaña y yo les recuerdo que nosotros tomamos a Wanderers en una posición muy complicada... a punto de descender. Y se salió adelante de muy buena forma y después, cuando nos pidieron que tratáramos de no involucrarnos en el promedio, el club se salvó de todo... cinco fechas antes de terminado el torneo. Y en este campeonato, tenemos un sólo partido perdido. Entonces, también siento que hay una animosidad fuerte con nosotros, la directiva y algunos jugadores.

No renunciará