Oani Teatro y "Soplo": una obra de investigación y formas animadas
Hoy y a mediados de enero se presentarán en Valparaíso, luego de haberlo hecho con gran éxito en Santiago.
Desde 2013 OANI Teatro viene desarrollando "Laboratorio para las formas animadas", proyecto en cuatro etapas financiado por Fondart, que finaliza con la creación y estreno de la obra "Soplo", dirigida por Claudio Marín, la cual nos habla sobre la condición humana de existir y habitar la soledad y el despojo, de atravesar por el exilio del otro diferente por parte de la sociedad contemporánea, del momento en que vidas completas acaban siendo solo un soplo, una respiración en el gran ciclo vital de esa sociedad. La propuesta nace de la acumulación de experiencias y aprendizajes obtenidos en las etapas anteriores del proyecto, así como de la urgente necesidad de la actriz Camila Landon Vío, directora artística de OANI, de darse "el tiempo-espacio y retomar mi proceso como actriz. Tomar distancia del área en donde me he especializado: la dirección de teatro para formas animadas".
Más allá de generar una dramaturgia, se propuso construir un guión de acciones en donde se tomaron dos puntos de partida: primero, el mito del andrógino mencionado por Platón en El Banquete y que Aristófanes utiliza para definir las clases de amor (entre hombres, entre mujeres y entre hombres y mujeres) y, segundo, el juicio de Anne Grandjean en 1765, rescatado por Michel Foucault en el libro Los anormales. Ambas visiones (la del mito y la dimensión filosófica que plantea Foucault) se constituyeron en diferentes fases para generar una posible estructura que impulsa y determina la acción para construir una experiencia estética y sensorial tanto en el espectador como en el equipo.
Por su parte, Claudio Marín señala que en la propuesta de Soplo "el escuchar, mirar, y dar libertad a todos los artistas que están trabajando en este proyecto es una clave". Además la metodología de trabajo pone su intención en centrar la mirada en los ejes interdisciplinares y pos-disciplinares que permiten cruces entre las artes corporales, las artes visuales, sonoras, animadas y por consecuencia, performativas. Desde esta perspectiva "estamos diseñando un tejido, una re-conexión de capas materiales hacia el desarrollo de una performance o una escenificación que está centrada más bien en un orden de lo perceptivo.
La obra está dirigida a todo público sin distinción de género ni condición social, con la intención de provocar y emocionar al ser humano como especie, por ello, OANI ha puesto especial énfasis en que esté al alcance de toda la comunidad, para lo cual ha dispuesto funciones en el Parque Cultural (Ex Cárcel) y en la Sala de Arte Escénico UPLA, así como otras funciones y talleres dirigidos especialmente a estudiantes secundarios de la V Región.
En la primera etapa denominada Teatro de la Imagen y de lo Sensible, se llevó a cabo un seminario de formación focalizado en la actuación y creación actor-marioneta; la segunda etapa, El Soplo de Vida, se basó en un trabajo de investigación de seis meses, en el cual se experimentó con formas y objetos que se integraron a la interpretación, por ejemplo el coligüe como objeto que ofrece infinitas posibilidades plásticas y emocionales de creación; la tercera etapa fue una Residencia artística en Bruselas, Bélgica, donde Camila Landon participó como actriz marionetista en el proyecto colectivo Laboratorio de Teatro de Marionetas "Plan B", invitada especialmente gracias el trabajo que OANI realiza hace cuatro años con la artista plástica Natacha Belova. Finalmente, la cuarta etapa corresponde a Soplo, escenificación donde se vincula al espectador a través de una propuesta estética con contenido emocional.