Fabián San Martín D.
Impedido de estudiar y trabajar está un joven porteño que sufrió un grave ataque de un perro en Placilla.
El pasado fin de semana los pololos Sebastián Gómez y Nataly Leiva, acudieron a disfrutar al tranque La Luz. Ya entrada la tarde decidieron regresar a sus hogares en Curauma y Placilla. Cuando atravesaban el pasaje Deadales de Oro en la población Cardenal Samoré, se encontraron con una pelea de perros. Uno de los canes se apartó del resto y se fue encima de Sebastián, que caminaba junto a su bicicleta. El animal, mestizo similar a un pastor alemán, atrapó con su hocico la mano izquierda del joven, que trató de usar su vehículo como escudo, mientras su asustada polola gritaba y pedía auxilio. La mascota finalmente soltó la mano de Sebastián, quien en estado de shock vio como le faltaba parte del dedo medio, que fue desgarrado por los dientes. Se aplicó un torniquete por la hemorragia, y vecinos le convidaron hielo y lo llevaron al Sapu local, pero por la seriedad de su condición fue derivado en ambulancia al Van Buren, donde le diagnosticaron "amputación traumática del dedo medio de la mano izquierda", de carácter grave. En el recinto asistencial el paciente fue intervenido por un médico cirujano, que logró suturar y posicionar el dedo en la extremidad. "Pero el médico le dijo que hay que esperar la evolución de unos seis días, ya que aún está el riesgo que no responda al tratamiento y lo pueda perder", comentó Nataly. Está con antibióticos y otros medicamentos Por ahora, por el color del dedo y porque Sebastián presenta sensibilidad, tendría buen pronóstico.
El afectado encuentra en reposo con licencia por un mes, y por ahora se ve impedido de asistir a sus clases nocturnas de Ingeniería en Construcción en la sede porteña del Duoc UC. También se vio truncado su inminente firma de contrato para desempeñarse en una obra en construcción. Es zurdo, y fue precisamente esa mano la que se vio perjudicada en el incidente. Cabe recordar que respecto de los dueños de animales, la nueva Ley Cholito establece que "son responsables de su alimentación, manejo sanitario y obligación de la norma, y de responder civilmente de los daños que éstos causen".