Fabián San Martín D.

"Es terrible lo que estamos viviendo. Es una sensación que no se la doy a nadie", señala una atribulada María Cortés González, madre del futbolista de Universidad de Chile David Pizarro, que junto a su familia fueron víctimas de la delincuencia en Playa Ancha.

Hace seis años que el Fantasista les regaló a sus seres queridos una hermosa vivienda a metros de la calle Alcalde Barrios. La señora María recuerda que por esa época, en Año Nuevo, el mediocampista estaba en Europa cuando de madrugada sufrieron el primer delito de importancia en su vivienda. En esa ocasión sustrajeron cuatro relojes de lujo que David le regaló a su padre, entre otras cosas de valor.

Lo que preocupa a los Pizarro Cortés es que en lo que va de este mes contabilizan siete visitas de los "amigos de lo ajeno". En seis de estas visitas, los ladrones no ingresaron a la casa habitación, sino que se focalizaron en la parte baja donde hay un par de bodegas. Se llevaron mercadería, herramientas, máquinas de cortar cerámica, llaves, mangueras, entre otras múltiples cosas.

Para frenar los ilícitos le encargaron a una maestro que reforzara las protecciones de fierro en puertas y ventanas, obra que se realizó el fin de semana. La señora María junto a su esposo David y su hija Camila profesan la fe evangélica y acuden regularmente al culto a la avenida Pacífico, donde se reúnen con otros familiares y hermanos en la fe. Con los delitos que ocurrieron durante estas semanas, se turnaron para asistir al templo y dejaban a uno de ellos en la propiedad para vigilar.

María reconoce que el lunes por la noche se confiaron en que el inmueble estaba más seguro con los arreglos y acudieron todos al culto.

Desafortunadamente una sola ventana que da hacia la cocina quedó sin protección metálica, situación aprovechada por un ladrón que se estima entró a la propiedad por una inconclusa construcción contigua. Una vecina fue testigo cuando quebró los vidrios y se metió a la cocina. Adentro dejó su mano impresa en una pared de acceso al baño. El antisocial, que vestía polerón gris con capucha, se dirigió a la habitación matrimonial para apropiarse de dos relojes de lujo-uno de la firma Armani- que David obsequió a su progenitor, además de ropa de marca y unos 400 mil pesos en efectivo.

El antisocial logró escapar. "Creemos que el mismo delincuente actuó en todos los robos, que nos conoce y nos ha sacado la película cuando acudimos a las reuniones de la iglesia", afirma la señora María.

Cambio de casa

La madre del ex jugador de Wanderers y el Manchester City confiesa que su famoso hijo la instó a cambiarse de domicilio, pero ella se niega porque no le gustan las mudanzas y por otra razón más poderosa: "Tengo a mi hija fallecida en el cementerio N° 3 y no me quiero ir porque siento que la estaría abandonando. Además que donde me vaya creo va a suceder lo mismo", admite con angustia.

Su hija Camila tiene ganas de emigrar, pero entiende la postura de su madre, que va más allá de lo material. "Analizaremos el tema como familia. No vamos a esperar tampoco que haya un herido. No hacemos una vida normal porque la casa no puede quedar sola. No es vida estar temeroso dentro de tu casa si tu no le haces daño a nadie", enfatiza la joven, que integra un grupo de whatsapp en el barrio para combatir la delincuencia.

El ex seleccionado chileno quiere mejorar la seguridad de su familia con alarmas y sistema de televigilancia, pero su progenitora no quiere más rejas que la hacen sentirse como prisionera en su hogar: "Acá no tengo riquezas, no soy adinerada porque yo no juego a la pelota sino que mi hijo, la gente se pasa muchos rollos. Sólo agradezco a Dios que no estábamos cuando nos robaron". Carabineros de la Primera Comisaría Sur acogió la denuncia.