Mientras unos funcionarios municipales desarrollaban un nuevo plan de limpieza y lavado en la Plaza Aníbal Pinto de Valparaíso, un perrito callejero de color negro se acercó calladito hacia ellos, para ver cómo estaba la cosa. Sin embargo, como se dio cuenta que tenían harta pega en el sector, rápidamente decidió ayudarles agarrando con su hocico una de las mangueras, poniéndose a regar.

"Apareció de la nada mientras se hacía la limpieza y no hubo forma de quitarle la manguera (...) fue simpático porque no era agresivo, sino que revoltoso", señalaron los trabajadores que lo vieron.

Por lo anterior, los porteños lo bautizaron como "Panchito aporta", ya que el perro se quedó colaborando hasta el final.

El alcalde Jorge Castro, quien estaba presente en el lugar fiscalizando la labor de limpieza, observó detenidamente al animal y manifestó que "fuera de chistes, lo único que me resta decir es que ojalá la ciudadanía hiciera lo mismo".

Precisó que "estamos dando una nueva y dura batalla contra la basura y este can es un emblema de lo que queremos que la comunidad haga. Que no boten basura a la calle, que ayuden a limpiar su metro cuadrado, pues no tenemos los recursos para hacerlo a cada rato. Así también, que cancelen el servicio de aseo y así Valparaíso será una mejor ciudad".